Tras un primer semestre de precios bajos, ahora los analistas observan un cambio de tendencia que podría profundizarse y continuar hasta fin de año.
El crudo de calidad Brent, de referencia en Europa y la mayoría del mundo, ha alcanzado máximos de hace tres meses superando los 82 dólares el barril. La escasez de oferta, a causa del ajuste en el mercado producido por los recortes de suministro de la OPEP+, la desaceleración de los flujos rusos y los últimos datos de la inflación en Estados Unidos, con caídas consecutivas del IPC, hacen prever que el precio del Brent pueda alcanzar hasta los 90 dólares el barril.
«Aunque las cotizaciones del crudo han construido un túnel de precios estable desde principios de mayo, con un sólido techo de 78 dólares el barril, este escenario podría cambiar de repente, desde este mismo verano», ha explicado el director general de Tempos Energía, Antonio Aceituno.
«Si la demanda se incrementa en la segunda mitad del año a los 1,2 miles de barriles diarios (Mbd), como esperan desde la OPEP+, o caminamos hacia los 2,2 millones, pronosticados por la Agencia Internacional de la Energía (AIE), siendo para ello condición sine qua non, la participación de China, en al menos un 70 por ciento, el Brent no tendría problemas en alcanzar los 90 dólares el barril», ha pronosticado Aceituno.
Según este experto, el principal motivo que hay tras el cambio de tendencia tiene que ver con «un mercado cada vez más ajustado y una escasez de la oferta». Este escenario, que repercute inevitablemente en el precio de la gasolina, podría durar al menos hasta final de año».
Fuente: Forbes