Mayo de 2025 se convirtió en un hito histórico para Vaca Muerta, al registrar la mayor cantidad de etapas de fractura en un solo mes: 2.588. Este récord refleja una tendencia clara de crecimiento sostenido y una eficiencia en la actividad que pone en evidencia la consolidación del shale neuquino como uno de los principales motores energéticos de Argentina. La media mensual, que podría estabilizarse cerca de las 2.000 fracturas si se mantiene el ritmo actual, marca un avance que supera ampliamente los niveles históricos y evidencia el avance tecnológico en las operaciones.
Detrás de estas cifras, la Fundación Contactos Energéticos, con informes elaborados por el ingeniero Luciano Fucello, ha documentado minuciosamente la evolución de la actividad desde que la industria migró de pozos verticales a horizontales. La participación de la principal operadora, YPF, ha sido clave en este proceso, concentrando en mayo el 51,5% de las fracturas, principalmente en colaboración con Halliburton. Desde 2016, esa alianza ha permitido concretar más de 2.369 etapas, consolidando a YPF como líder en la actividad.
El mercado de fracking en Vaca Muerta también ha experimentado una reconfiguración en los últimos años. Empresas como Baker Hughes y Weatherford transfirieron sus activos, y nuevos jugadores, como Tenaris y Pluspetrol, adquirieron estos sets en el marco de una estrategia de profundización en la explotación no convencional. Actualmente, existen doce sets activos distribuidos entre varias compañías, con la posibilidad de que esa cifra suba a trece en operaciones puntuales. La tecnología, como el método dual frac, ha sido fundamental para incrementar la actividad sin necesidad de ampliar la flota de equipos, permitiendo una evolución más eficiente y sostenida.
El crecimiento en etapas de fractura no solo refleja avances tecnológicos, sino que también anticipa una mayor conectividad de los pozos a las redes de transporte, fundamentales para sostener el volumen de producción. La infraestructura, como los oleoductos Oldelval y Otasa, y la adecuación de refinerías locales, juegan un papel clave en esta etapa de expansión. La producción de petróleo en Neuquén alcanzó los 462.061 barriles por día en abril, un dato que evidencia el impacto directo del desarrollo de Vaca Muerta en la economía energética del país. Mientras la actividad continúa alcanzando récords, otras cuencas no convencionales, como Palermo Aike en Santa Cruz y Aurora Austral en busca de shale gas, comienzan a mostrar su potencial, ampliando el horizonte del shale argentino en un escenario de crecimiento sostenido.