El mercado internacional de petróleo vive momentos de tensión y volatilidad, impulsado por la escalada del conflicto en Medio Oriente. En la jornada de ayer, el precio del crudo Brent, referencia global para fijar el valor de los combustibles en Argentina y en el mundo, registró un aumento del 1,45%, situándose en torno a los US$ 74,52 por barril. Durante la sesión, incluso tocó los US$ 75 en su nivel intradiario, marcando una subida significativa en un escenario marcado por la incertidumbre geopolítica.
Este incremento, sin embargo, aún no alcanza los niveles máximos alcanzados el pasado viernes, cuando el Brent llegó a US$ 78,5 tras la ofensiva militar de Israel contra Irán. En esa jornada, el crudo experimentó una subida del 13%, reflejando la fuerte tensión en la región. La actual escalada en los precios responde principalmente a los ataques que Irán lanzó contra instalaciones de inteligencia en Tel Aviv, generando preocupación en los mercados internacionales sobre posibles repercusiones mayores en el suministro de petróleo.
Uno de los principales temores que acecha al mercado es que Irán pueda decidir cortar el paso de barcos petroleros a través del estratégico Estrecho de Ormuz, una zona clave que controla aproximadamente el 20% del comercio mundial de petróleo. La posibilidad de una interrupción en el tránsito por esa vía ha disparado los precios y aumentado la volatilidad, en un contexto donde la estabilidad de los precios del crudo se vuelve cada vez más precaria.
Expertos del sector advierten que la situación en Medio Oriente continúa siendo un factor de riesgo importante para el mercado petrolero global. La tensión en la región, sumada a las recientes acciones militares, mantiene en alerta a los inversores y a los países consumidores, como Argentina, que dependen en gran medida de las importaciones de petróleo y sus derivados.
Mientras tanto, los analistas esperan que los precios del Brent puedan mantenerse elevados en los próximos días, dependiendo de cómo evolucione el conflicto y si Irán decide adoptar una postura más agresiva.