La meta del autoabastecimiento energético en la Argentina empuja a algunos actores de la industria petrolera a expandir su mirada. En lo referente a indumentaria, con el correr del tiempo las exigencias de las empresas variaron de tal manera que fabricantes como Lakeland debieron abrir sus horizontes hacia todo el globo. “Con 40 años en el mercado mundial, nos afianzamos en el rubro con plantas productivas en México, Estados Unidos, China y la Argentina, y puntos de venta en todo el mundo, distribuidos en Chile, Perú, Colombia, Ecuador, Venezuela, Caribe, Rusia, Hong Kong, Francia, Italia, Gran Bretaña y Kazajistán”, destaca Agustina Cendali, gerenta general para la Argentina y manager directora para América Latina de la firma.
La muestra material de esta expansión es la división de las diferentes líneas de cuidado para el operario: ropa de protección química, trajes de bomberos fyrepel, protección de manos y brazos, ropa de protección al calor, ropa reflectiva de alta visibilidad, ropa de uso limitado y tejida, todo fabricado en talleres propios y sin contratistas. “Ofrecemos indumentaria en la configuración que el usuario necesite, ya sea en overoles, camisas, pantalones, chalecos, camperas y térmicos, y desarrollar productos a la medida”, describe Cendali.
En ese sentido, la firma cuenta con una serie de trajes descartables para salpicaduras de líquidos o partículas secas, peligrosas o no, con distintos niveles de protección. El de mayor envergadura se utiliza en actividades donde el líquido a manipular puede provocar un daño en la epidermis. “Son totalmente encapsulados, se encuentran sellados por dentro y por fuera para evitar la entrada de gases”, agrega la ejecutiva.
Como valor diferencial, realiza inspecciones en las empresas con las que trabaja para llevar adelante un relevamiento de riesgos y así recomendar el tipo de traje adecuado para las tareas específicas a ser desarrolladas, con un complemento que optimiza la demanda de sus clientes: a través de su página web, brinda información técnica sobre el uso de los diferentes trajes para que los operarios puedan tenerla a su disposición de forma inmediata.
Apuesta nacional
Si bien el desarrollo de la compañía abarca a todo el segmento industrial, centra su mayor nivel de actividad en los principales mercados de Oil & Gas, eléctrico, minero y petroquímico. Allí, a entender de Cendali, cada vez son más las industrias que deciden ofrecer más y mejor protección a sus operarios. “La Argentina está a la vanguardia en indumentaria de protección en la región. Si bien aún falta mucho, se nota un creciente interés en esta materia, por lo que las perspectivas son muy buenas”, enfatiza la directiva.
Sucede que en el campo específico en el que actúa la firma, la actividad crece de manera sostenida en los últimos años, donde muy pocas empresas tenían dentro de sus EPP la indumentaria de protección, y en la actualidad son cada vez más las que brindan el producto. “Aunque en algunos casos se carece de normativas nacionales que regulen esta protección, muchas empresas lo hacen voluntariamente y la adoptan para sus operarios”, pondera la ejecutiva.
Con esa rutina, Lakeland apuesta no sólo al mercado argentino, sino también al de la región. Es por eso que este mes mudó sus instalaciones y oficinas a una nueva planta de fabricación y depósito, que duplicará su espacio disponible actualmente.
Esta expansión viene de la mano de la incorporación de maquinaria de última tecnología, que le permitirá incrementar la producción y disminuir costos, una de las principales demandas de la industria en días de bajos precios de las materias primas.
Las novedades de la empresa surgida en Estados Unidos no se detendrán ahí. En su línea de confección nacional, también en el último mes del año comenzó con la fabricación de su primer traje estructural para bomberos. “Hasta el momento, solamente se comercializaban los que venían de nuestras plantas del exterior. Esto nos da un valor agregado importante para comenzar 2016, para el que ya estamos preparados”, concluye Cendali. ℗